Los cómics en los noventa atravesaron un duro bache. La crisis parece que se agudizó en DC, donde los guiones bajaban y bajaban de nivel y se mataba a Superman, se lisiaba a Batman y se le sustituía por Azrael; se publicaban continuamente sagas sin mucho sentido. Pero a pesar de esta decadencia en el nivel de las historias se hicieron algunas muy buenas. Buena parte del mérito en que esto se produjese es para el guionista John Ostrander y para el dibujante Tom Mandrake. A principios de los noventa ya habían revolucionado a El Espectro con una larga etapa de sesenta y tantos numeros en la que por primera vez se supo sacar jugo a un personaje tanpsicológico y oscuro como El Espectro en una serie regular. Y si fueron capaces de hacerlo una vez, porqué no dos.
Siguiendo ese lógico razonamiento, los dirigentes de DC decidieron revitalizar al único personaje de la JLA que por aquel entonces no tenía serie regular: el Detective Marciano. Para ello pusieron a la pareja creativa que había llevado a la grandeza al Espectro y fue una buena elección, desde luego.
Fue la primera serie regular del Detective Marciano y su protagonismo en el Universo DC en solitario había sido prácticamente nulo, limitándose a sus apariciones en la JLA. Ello dejaba mucho margen a Ostrander para adentrarse muy mucho en muchos aspectos del pasado y de la vida en La Tierra de J'onn J'onzz, el cual lo aprovecho durante toda su etapa, dejando el hilo argumental en un segundo plano. Al igual que Superman es el único superviviente de su planeta (nuestro Marte), pero el había convivido con ellos , y quería a mucha de la gente que pereció por culpa de su hermano. La lucha contra él, contra su némesis, será el principal hilo conductor de la trama, pero, como ya he dicho antes, está en un segundo plano.
Además de tener cierto parecido con Superman, tambien lo tiene con El Espectro. Los dos buscan hacer justicia, su justicia. Esto les lleva a cometer los mismos actos que los que condenan. El Espectro tenía a su personalidad humana para frenarle, Jim corrigan. Pero el Detective Marcianono, es un ser solitario, cuya única compañía que le queda es la JLA y que tiende a obtener la verdad de una manera poco honrosa, por la que ha juzgado a otros en otras ocasiones. Pese a su fuerza y sus innumerables y sorprendentes poderes el Detective Marciano es débil en ese sentido. Todo esto lo hace un cómic sobresaliente, que, aunque no llegue al nivel del Espetro no le sigue demasiado a la zaga, y el que Mandrake hace un estupendo trabajo como nos tiene acostumbrados. Totalmente recomendable, además por 40 euros tienes toda la serie más especiales. Un must have!
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